Hacinados viajan los pacientes renales caroreños a la ciudad de Barquisimeto, quienes tienen a disposición una unidad de Transbarca encargada para la movilización hacia los lugares donde deben cumplir con el tratamiento de hemodiálisis.
Tres veces a la semana viajan a la capital larense los mas de 50 pacientes renales del municipio Torres, divididos en grupos, quienes ocupan la unidad con el acompañante.
Los pacientes han manifestado que este transporte no les brinda ningún tipo de comodidad, muchos de ellos tienen un estado de salud un poco deteriorado por lo que el viaje se vuelve una tortura.
Entre otras cosas, detallaron que el autobús viaja con el máximo de su capacidad ya que al parecer, también trasladan a ocho trabajadores de la empresa de transporte masivo diariamente.
Aseguraron que a todo eso se le suma las "colas" que los choferes del transporte dan a amistades y conocidos, situación que pone en riesgo la salud de los pacientes ya que no se cumple con las medidas de distanciamiento social y bioseguridad dentro de la unidad.
Ante eso, exigen la asignación de una unidad más espaciosa donde puedan viajar de una manera más cómoda y a su vez no permitan que personas ajenas viajen con ellos por medidas de prevención.
Piden una sala de hemodiálisis
El pasado mes de febrero, las autoridades locales de Torres, anunciaron el inicio de trabajos de adecuación de la sala de diálisis peritoneal en una sala de hemodiálisis, inversión para el momento de 1.500.000.000 de Bolívares pero, al parecer todo quedó en proyecto, pues los pacientes continúan viajando a Barquismeto para poder cumplir con sus tratamientos.
Ante eso, realizan un nuevo llamado a las autoridades locales y regionales para que solucionen la situación por la que se encuentran atravesando.
Yanitza Martínez.-
Fotos: Cortesía
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