Mucho se esperaba de Caribes de Anzoátegui en la Serie del Caribe Mazatlán 2021. Sin embargo, fue muy poco lo que mostraron los campeones de la LVBP en la ronda regular, al finalizar con récord de 1-4, dejando muy malas impresiones en el costado ofensivo.
Pese a ser un equipo que se caracteriza por batear, fueron los hits los que faltaron a la fiesta en tierra azteca. La novena oriental cayó en un slump desde el primer día, y pese a los intentos del mánager Mike Álvarez de despertar a sus muchachos, nunca llegó el respaldo ofensivo para un pitcheo que contra todo pronóstico usó la capa de héroe, aunque finalmente de poco sirvió.
Este viernes los aborígenes regresaron a Venezuela con las manos vacías, tras su fallido intento de conquistar su primer cetro del Caribe y el octavo para una delegación nacional.
Hombre a hombre la alineación de la tribu pintaba para ser un camión de leña, aunque quizás no al mismo nivel de las Águilas Cibaeñas, quienes a propósito, dominaron la ronda regular. Con piezas como Willians Astudillo, Ali Castillo, Danry Vásquez, Balbino Fuenmayor y Oswaldo Arcia, era bastante lo que se esperaba de los cañones de Anzoátegui. Pero aún así, el average colectivo fue de .196.
Al slump ofensivo se le sumó la baja de Rafael Ortega, quien en la LVBP fue una de las chispas que prendía la mecha, quedando en evidencia que su madero es fundamental en Caribes. Además, una de las peores notas las dejó Fuenmayor, quien pese a haberse recuperado de su lesión en la muñeca, fue el único criollo en no dar hits en más de diez turnos, al pararse 15 veces en el plato.
Así fue como quedó demostrado que en el beisbol, y especialmente en un torneo corto, es necesario conjugar el pitcheo dominante con el bateo oportuno, además de una defensa sólida, para lograr los objetivos deseados.
LIDER
COMENTARIOS