Este miércoles, cuerpos de seguridad del Estado en Carora, estuvieron desplegados en el casco central de la capital torrense efectuando el cierre de los establecimientos comerciales no autorizados para laborar durante la cuarentena radical.
Los uniformados, también efectuaron el desalojo de vendedores informales en la zona del Trasandino para dar cumplimiento al Decreto Presidencial.
En desacuerdo
"Queremos y necesitamos trabajar porque los impuestos municipales no esperan", manifestaron los comerciantes del centro de la ciudad, quienes indicaron que las dos semanas de cuarentena radical significaría un bajón en las ventas que ya de por sí están mermadas a lo que se le suma los gastos en cuanto a nóminas, alquiler, servicios e impuestos municipales que mensualmente deben cancelar.
La medida es catalogada como arbitraria debido a la situación económica que atraviesa Venezuela, muchos de los comerciantes, de manera especial los informales, dependen del día a día para poder subsistir y cumplir con el sustento familiar.
Ante eso, se conoció que solicitarán una reunión con el Prefecto del municipio Torres, para buscar una alternativa que les permita llevar a cabo sus labores durante las semanas de cuarentena radical.
Yanitza Martínez
Fotos: Cortesía
COMENTARIOS