En un país donde actualmente un cartón de huevos puede costar más de dos salarios mínimos, acudir a un hospital público también puede costar un ojo de la cara, y es que no existe diferencia en los gastos que se deben hacer para ser atendido en un centro de salud público o privado en Carora.
La crisis sigue rondando al Hospital Pastor Oropeza y a todo aquel que allí se encuentre recluido, pues, para poder ser atendidos, los pacientes deben disponer de medicamentos e instrumentos quirúrgicos de lo contario, su vida estaría en peligro, ya que el máximo centro de salud en la ciudad no cuenta con insumos.
Familiares aseguraron para El Informante que ante la falta de personal médico, muchas veces tienen que esperar más de 24 horas que llegue algún especialista, agregando que en el área de medicina interna reina la soledad.
Indicaron que a la hora de realizar algún examen de rutina, como hematologías completas deben acudir a los laboratorios privados de la zona, dado que el que funciona en el nosocomio local, sólo se encuentra realizando pruebad VDRL para los certificados sanguíneos, Hepatitis A, B y pruebas de embarazo.
Asimismo, afirmaron que diariamente se ven obligados a desembolsillar altas sumas de dinero para costear medicinas, exámenes médicos, además de los gastos en agua y comida.
Finalmente mencionaron, que a la hora de realizarles exámenes de laboratorio, muchos de los pacientes recluidos en cuarto piso tienen que bajar y subir las escaleras, dado que el ascensor del HPO se encuentra dañado.
Redacción EI.-
COMENTARIOS