Pese a los esfuerzos que ha realizado el gobierno municipal de Torres en el ordenamiento de la ciudad y en la eliminación de la anarquía, un grupo de vendedores informales, poco a poco, han ido colmando la calle José Luis Andrade, a la altura del Grupo Escolar Ramón Pompilio Oropeza.
Vendedores de ropa, quincallería y calzados, es lo que se puede apreciar en los tarantines de estos comerciantes informales, quienes una vez que fueron de desalojados de las avenidas, Francisco de Miranda y 14 de febrero han ido tomando parte de la acera de esta institución educativa.
Conductores y peatones, han manifestado su descontento ante esta nueva aparición de vendedores ya que no les permiten poder transitar ni caminar libremente por la mencionada zona.
Yanitza Martínez.-
COMENTARIOS