• Creemos en el emprendimiento de la empresa privada, y con ellos conjugamos esfuerzos para que las cosas se den. Nuestro empeño por rescatar esta pelota fue devolverle a los torrenses un entretenimiento sano y de calidad.
• Considero que un espectáculo barato no garantiza calidad y desmotiva la asistencia. En cambio, si se compaginan las dos cosas, todos salimos ganando y fortalecidos. “Si el espectáculo es bueno, todos ganamos”. Considera.
• Aspiro que los seis equipos salgan robustecidos y con ganancias, para que cada año nos presenten un mejor beisbol.
PCH.- Especial
El alcalde Javier Oropeza ha estado al tanto de los diversos comentarios que circulan por las redes sociales, sobre el precio de las entradas del torneo en el que compiten los seis equipos del beisbol tradicional caroreño. De plano aclara que nada tiene que ver con la fijación del valor de las entradas, una decisión que correspondió a la liga que integran los equipos conjuntamente con el empresario. “Servimos de intermediarios, de facilitadores para que las cosas se den, sin participar directamente en el negocio porque soy un firme creyente del emprendimiento del sector privado”.
Explica el alcalde Oropeza, que los seis equipos y el empresario conformaron una sola mancomunidad. “Todo el dinero de las entradas, publicidad, ventas de bebidas y estacionamiento van para un mismo pote. Hay equipos que llevan a las gradas más fanáticos que otros, sin embargo se acordó que las ganancias, y también las pérdidas, se repartan por igual. Sin duda una salida muy democrática que equilibra la competición porque todos tendrán iguales ingresos”.
Entrando más en detalles sobre el precio de las entradas, precisó que no le corresponde a él decir si están baratas o caras, sobre todo entendiendo las limitaciones económicas de cada quién. “El espectáculo es el que debe establecer si son caras o no, y los fanáticos decidir si vale la pena asistir o no. Si los clubes no tienen ingresos para financiar buenos peloteros, sin duda el torneo decaerá por falta de calidad y la desmotivación por asistir también”. Recordó que antes, cuando comenzó el beisbol tradicional, empresarios y productores prósperos eran quienes financiaban cada una de las divisas, tiempos que ni volverán ni se compaginan con la realidad actual de crisis económica.
De igual manera advierte Javier Oropeza, que la alcaldía no está en capacidad de financiar a los seis equipos y dejar la entrada libre. Hacerlo lo calificó de irresponsabilidad, visto el estado calamitoso del mobiliario urbano del municipio, el bajo salario de los funcionarios municipales y el deplorable estado de las instalaciones y bienes de la alcaldía. “Entiendo que eso se llegó a hacer, pero se debe reconocer que también trajo como consecuencia el quiebre de la liga y que esta pelota se paralizara por varios años”, señaló.
“Hay quienes comienzan a comparar, a partir de lo que se conoce como populismo, mi gestión con las anteriores, que si antes no se cobraba y ahora sí. Las realidades ahora son distintas, sostiene. Por ejemplo, agrega, antes el ente paramunicipal encargado de las instalaciones deportivas cobraba las vallas, sin embargo ese dinero nunca se supo dónde fue a parar. En cambio ahora los ingresos se repartirán entre los equipos que bregarán cada uno con sus ingresos y corresponderá a cada cual rendir cuentas financieras. Mientras a la alcaldía, que responsablemente denunciamos conseguimos en quiebra, le corresponderá cobrar el 10% de los impuestos municipales. Juguemos a ganar ganar, propone. Los fanáticos disfrutando un beisbol de calidad y comentando que su inversión al asistir al juego no se perdió, los equipos compitiendo sin ventajismo financieros de por medio y la alcaldía recibiendo ingresos que retribuimos en obras. Insisto, si el espectáculo es bueno, todos ganamos”.
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