El alcalde del municipio Torres, Javier Oropeza, condenó determinantemente la detención de la licenciada María Suárez, jefa de enfermería del Hospital Pastor Oropeza de Carora, en un suceso que repudió toda colectividad y trascendió nuestra vida cotidiana al convertirse en tendencia nacional por las redes sociales.
Sobre el caso en cuestión, afirmó que se trata de un hecho que una vez más saca a relucir, los abusos de poder que cometen los gobiernos autoritarios.
La Primera autoridad civil del municipio, al expresar su solidaridad a todos los gremios de la salud, particularmente el de enfermeras, se sumó al llamado general que desde el municipio Torres hacen al país, para que este atropello que raya la injusticia no quede impune, ni se repita.
“Se debe castigar a los responsables. Más cuando los testimonios indican que el procedimiento empleado contra la jefa de enfermería se llevó a cabo en su sitio de trabajo, y en aparente respuesta a un llamado de atención que como profesional de la salud hizo al funcionario policial”, cuestionó Oropeza.
Más grave aún, consideró el alcalde Oropeza, el irrespeto de los uniformados hacia el director del Pastor Oropeza, “un oficial militar que pidió le quitaran las esposas a la licenciada Suárez ante lo cual se negaron”, resaltó.
“Aquí todo aquel investido de autoridad, en un estado de derecho y justicia, tiene sus obligaciones perfectamente delimitadas. Los que resultamos electos por la voluntad del pueblo, con nuestros deberes y derechos constitucionales; y los que visten de uniforme con las limitaciones que marca la ley y el respeto que deben tener con los ciudadanos.
En un centro de salud, como el Hospital Pastor Oropeza, son sus directivos y el cuerpo de salud quienes mandan. Debemos erradicar cuanto antes a todo aquel imitador de Carujo, porque en el mundo democrático en el que supuestamente vivimos, resultan inaceptables”.
BOTÓN CIUDAD DE CARORA PARA LA ENFERMERA
Prensa Alcaldía de Torres.-
COMENTARIOS