Por: Lokman González
¡Yo
también estoy arrecho!
Imagínate
sí están arrechos algunos diputados, ministros, gobernadores, alcaldes,
similares, afines y conexos, como estaré yo que no vivo en “Cumbres de Curumo”,
que no le celebré a mi hija sus 15 años en una isla del caribe, con Chino y
Nacho cantando y los invitados llevados y traídos en vuelo “Charter”. Ni tengo
camionetotas de alta gama, con guardaespaldas.
Arrecho estoy como Jesús cuando
expulsó a los mercaderes del templo o cuando nuestro Libertador Simón Bolívar,
el 12 de enero de 1824, en Perú, dictó el decreto de pena de muerte contra los
corruptos.
No podemos tapar el sol con un dedo,
debemos reconocer que esta trama de corrupción es de grandes dimensiones y que
no sólo envuelve a altos funcionarios del gobierno sino también a empresarios,
opositores, militares; dentro de una muy bien edificada trama de corrupción con
graves daños a la nación. Orquestada principalmente por funcionarios propuestos
o vinculados con muchos de lo que hoy sin ningún tipode pudor salen a
“repudiar”, “colaborar” con las investigaciones, presidir comisiones
(¿autoprotección?) o en el peor de los casos anunciar que van a investigar y/o
auditar lo que se ha debido de hacer mucho antes.
Mientras más tratan de aclarar
enrarecen más el ambiente porque se ciernen más dudas sobre la inacción ante
eventos anteriores protagonizados por un factor de la oposición que piden
sanciones, manejan recursos de la nación y andan como “Pedro por su casa”, con
una impunidad que deja perplejo a propios y extraños.
Dentro de toda esta difícil
situación de “traición a la patria” se ha dado un paso que se pudiera ver como
positivos. La posible aprobación en la Asamblea Nacional de la “Ley Orgánica de Extinción de dominio”,
que establece la obligación de probar la licitud o ilicitud de los bienes
patrimoniales. Al respecto el Doctor Emilio Urbina, señala que esta ley
“faculta al estado para confiscar, mediante sentencia firme, los bienes de las
personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras vinculados con delitos
cometidos contra el patrimonio público y el tráfico ilícito de sustancias
psicotrópicas y estupefacientes, así como los bienes que se hayan enriquecido
ilícitamente al amparo del Poder Público”. Esta ley se desarrolla a partir de
una ley modelo de las Naciones Unidas, donde Colombia, ha sido pionera. Desde
1991 la ha implementado.
Esta Ley Orgánica de Extinción del
Dominio es de naturaleza patrimonial civil en donde lo que se va a verificar es
la legalidad o no del origen de los bienes del patrimonio de una persona,
independientemente sí está acusada o no penalmente. Ejemplo el caso de “Las muñecas del petróleo” y cuanto
testaferro exista. Ya con eso estamos hablando de DELINCUENCIA ORGANIZADA.
Ante esta eventual aprobación de
esta ley propongo que una vez sancionada y promulgada todos los altos
funcionarios del gobierno, desde el Presidente, Ministros, Diputados,
Gobernadores, Alcalde, Concejales, entre muchos; den un paso al frente y
soliciten de manera individual sean investigados la procedencia de todos sus
bienes patrimoniales tanto de ellos como de sus familias y allegados.
¿Estaremos viendo la luz en el
túnel? O ¿es un tren que viene de frente?
“Los
empleos públicos pertenecen al Estado; no son patrimonios de particulares.
Ninguno que no tenga probidad, aptitudes y merecimientos es digno de ellos”
Simón
Bolívar
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