La socialité Kim Kardashian se cansó de explicar para justificar, en el plano de la ética y lo ejemplar, la forma en que aprovechó su vida privada para crear un imperio televisivo millonario.
Por lo que la empresaria defendió abiertamente lo que ella llamó «cultura del esfuerzo» que la define a ella, a su madre Kris Jenner y a sus hermanas.
Kim al ser una experta en explotar, promocionar y vender su estilo de vida, se siente muy orgullosa de su condición de “mujer trabajadora” y aconsejó a las mujeres que desean ser empresarias.
«Tengo el mejor consejo para las mujeres que se quieren dedicar a los negocios: ¡Levanta el trasero y ponte a trabajar! Parece que nadie quiere trabajar estos días», aseguró a la revista Variety.
Este comentario desató críticas en redes sociales, pues según los internautas la empresaria habla desde una perspectiva privilegiada, ya que vive una vida de ensueño con todas las comodidades y lujos existentes, a diferencia de muchas personas que trabajan más de una jornada normal y reciben una mala paga.
Finalmente, la exesposa del rapero Kanye West (Ye) aseguró a Variety que el éxito de sus colecciones de ropa, cosméticos y demás artículos de belleza terminó con el mito de que Kim Kardashian es famosa por ser famosa. «Las críticas nos dan igual. La verdad es que trabajamos muchísimo, pero si la gente piensa eso, lo siento. Ya no tenemos energía para todo esto. No bailamos, ni cantamos ni actuamos: vivimos nuestras vidas y logramos tener éxito. No quiero ser desagradable, solo estoy hablando de hechos».
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