La proteína animal sigue alejándose de la mesa de los caroreños gracias a sus elevados precios los cuales se incrementaron considerablemente con el alza del dólar paralelo registrada en estas últimas dos semanas.
“Llevamos lo que podemos”, es lo que señalan los caroreños en algunas carnicerías de la ciudad de Carora, quienes aseguran llevar hasta 5 bolívares de cada carne para que la proteína animal no desaparezca del todo de la mesa.
El kilogramo de carne de res, se ubica entre los 30 y 35 bolívares, montos imposibles de cubrir para un pensionado o persona que perciba un salario mínimo.
Comentó la señora Alba Torrealba que le ha tocado alternar la proteína animal con la de los granos y que no es mucho lo que puede comprar ya que con lo que percibe mensualmente por el Seguro Social lo debe distribuir para la alimentación y medicinas, respectivamente.
Comentan algunos encargados de carnicerías y frigoríficos de la localidad que las ventas han mermado considerablemente, sin embargo, señalan que productos como la costilla, el hueso rojo y el hígado de res, han sido los más demandantes en los últimos días por el consumidor caroreño.
Yanitza Martínez.-
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